Este programa establece los principios, políticas y procedimientos necesarios para garantizar que la conducta empresarial sea ética, legal y transparente en todas las interacciones internas y externas. Al fomentar una cultura de transparencia y ética, las empresas no solo cumplen con sus obligaciones legales y normativas, sino que también fortalecen la confianza de los stakeholders, mejoran su reputación y contribuyen positivamente al desarrollo sostenible de la sociedad